DECISIONES
PREVIAS
PRIMERA
DECISIÓN: LA ESCALA
Por
supuesto, el espacio del que podemos dispones es determinante. Pero, claro
está, cuanto menor sea la escala menor será el realismo.
En mi caso con la posibilidad de tener una superficie de 2 a 3 m de longitud
y de 1,2 a 1,5 m de ancho pensé que podía diseñar
una pequeña maqueta con suficientes posibilidades en escala H0
Es "hache cero" aunque a veces se confunda con las letras "H"
y "O" como puede pensarse viendo la imagen de la izquierda en
la que, también la "g" parece una "s" (Clicar
encima de la imagen para verla a mayor tamaño). Dicha imagen sirve
para poder comparar los tamaños de las escalas más comunes.
Por supuesto no son las única pero son las más fáciles
de encontrar en el mercado español. Las escalas G, 1 -e incluso
la 0- están básicamente pensadas para trenes de jardín
por lo que mi elección debía reducirse a escoger una de
las escalas Z, N, TT o H0. La escala TT muy popular en la Europa del este
tiene aún poco material disponible en el mercado español
y la escala Z es casi lo que los aficionados denominan un "kit de
supervivencia". En esta tesitura la elección -dura elección,
hay que reconocerlo- se reducía a elegir entre N u H0. Debo decir
que en esta decisión ayudó mucho mi negativa experiencia,
hace unos cuantos años, bastantes, con el Ibertrén de tres
carriles a escala N. Ahora las cosas han cambiado lo suficiente para que
no se pueda descartar de entrada esta pequeña escala que permite
unos circuitos muy completos en la cuarta parte del espacio que se necesita
en H0. Otro motivo: como deseaba compartir la maqueta con niños
pensé que para ellos la escala N era excesivamente pequeña.
Mi elección fue, pues, la H0.
SEGUNDA
DECISIÓN: MARKLIN TRES CARRILES
Hay
dos sistemas para hacer funcionar trenes en miniatura, Uno, com en la
realidad utiliza los dos carriles como conductores de corriente eléctrica.
Se utiliza corrriente contínua y un carril ejerce como polo positivo
y el otro como negativo. En el sistema de tres carriles la corriente entra
por el carril central y sale por los dos railes laterales. Por supuesto
no hace falta que el carril central sea contínuo y puede disimularse
dejando visibles solo unos puntos de contacto. Este sistema, utilizado
actualmente por Marklin, ha sustituido el carril por unos puntos llamados
"pukos".
Si
se desea realismo hay que optar por los dos carriles pero esto, a mi modo
de ver, complica bastante las posibilidades de juego al principio cuando
se dispone de uno o dos sets de inicio y una cuantas vías complementarias
porque no permite hacer bucles de retorno. Con tres carriles no hay ningún
problema para que dos trenes circulen por la misma vía en sentidos
contrarios, que una vía tenga vía de retorno o que se pueda
invertir el sentido de la marcha de un tren sin tener que acudir a complicados
montajes y dispositivos especiales.
Märklin
es la única marca que funciona con tres carriles aunque cada vez
más el resto de marcas ponen en el mercado locomotoras que funcionan
con este sistema. Hay una buena cantidad de marcas que ofrecen material
para dos carriles. Las más conocidas son Fleischmann y Rocco además
de la que comercializa Marklin bajo el nombre de Trix. Existen otras,
no tan populares por sus precios, pero excelentes por su material como
Hag, Brawa o Bemo. Recientemente está empezando a introducirse
en el mercado español, con precios competitivos, la marca Piko
de la antigua DDR. Además, claro, de las españolas Ibertren
y Electrotren imprescindibles para los que deseen utilizar material de
RENFE.
Como
a mi me importaba más la circulación de trenes que la recreación
de un paisaje realista mi opción fue elegir Marklin de tres carriles
con la vía C. No quiero decir con esto que esta sea la mejor solución,
que no existe. Cada uno debe escoger en función de sus intereses
y seguir con su opción aunque cuando veamos maquetas que han elegido
otra nos consuma la envidia al ver lo bonitas que son.
TERCERA
DECISIÓN: DIGITAL
Es
indiscutible que el sistema analógico es más económico
para comenzar. Pero para que puedan circular diversos trenes por la misma
vía hay que diseñar un circuito con bloques o cantones,
lo que requiere aislantes, conexiones eléctricas y pupitres. A
la larga, utilizando el sistema digital también haremos lo mismo
pues querremos controlar cada vez un número mayor de trenes y ampliar
todo lo posible el tamaño de la maqueta. Pero esta es una afición
cara y para empezar si uno puede comprar un par de cajas de iniciación,
como mínimo una de ellas con dos trenes y un transformados de 60
VA, puede darse por satisfecho. En digital con la Mobile Station de Marklin
se pueden controlar perfectamente cuatro o más trenes que circulen
a diversas velocidades y en el mismo o distinto sentido por la misma línea.
Poniendo, claro, las vías y desvíos necesarios para evitar
que choquen. Sólo necesitamos la Mobile y el transformador que
vienen incluidos en las cajas de inciación. Mi primera caja fue
la que lleva como referencia el número 29820
con un tren de carga arrastrado por una locomotora de vapor BR 50 y un
tren de pasajeros arrastrado por una diesel V 160. Dos locomotoras excelentes
y clásicas, con luz y sonido. El precio no llegó a los 600
euros en el año 2006.
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